Creciendo En La 11

Nací el 27 de julio de 1992 en Chinchiná – Caldas. Soy hija de Dora Saavedra y hermana de Ángela Rocío Sánchez. Vivimos en Bogotá desde hace 18 años y un poco más, lo digo con exactitud porque mi abuelo me enseño a calcular ese tiempo quitándole 1 año a mi edad y el resultado será exactamente el tiempo en que llegamos al barrio. Llegamos a Bogotá como lo hacen muchas familias, buscando mejorar su calidad de vida. He vivido en mi barrio desde siempre, desde que tengo memoria que existo.

El primer lugar donde estudie fue el jardín de mi barrio: El jardín Gloria Lara, queda en la esquina de mi cuadra, frente a la cancha, la cual es testigo de los juegos de mi infancia: ladrones y policías, las cogidas, ponchados y muchos más que con mis amigos del barrio inventábamos,  eran los días más provechosos desde la mañana hasta la noche inventando que jugar, de vez en cuando escuchando a mi abuela o a la mama de mis amigos llamarlos por la ventana para comer algo y recargar energías. Al lado del jardín queda el salón comunal, que es el lugar que le dio el sobrenombre de TTES a mi barrio.  Recuerdo también una casa de latas que todos llamaban “iglesia” para mí siempre fue la iglesia más fea del mundo y no entendía porque mi barrio tenía una iglesia en esas condiciones. Mi barrio, es el lugar en todo el mundo en el que me siento segura, no lo niego desde pequeña he escuchado las alarmas, mi experiencia me indica que a las 9:30 pm empiezan a sonar como hasta las 11:00 pm, esto se debe a que mi barrio siempre ha estado habitado por personas que sufren de delirio de persecución, cualquier persona ajena al barrio es sospechosa (De qué? No se sabe, pero es sospechoso), está también es otra característica de mi barrio: pues la mayoría de habitantes hemos estado allí por muchos años.

El punto de referencia del Gloria Lara era el potrero que estaba frente a mi casa, potrero que era el protagonista todos los Agostos puesto que era el lugar predilecto de muchos para volar cometa. Aunque para mi familia siempre ha sido sinónimo de peligro. Mi casa tenia la mejor vista, debido a que está situada en la mitad de la cuadra, se alcanza a ver la iglesia, las dos esquinas de acceso y la cuadra del frente.

Mi casa es una de esas que ayudaron a cambiar el barrio recuerdo que la casa más grande era de dos pisos en obra negra, individualmente y a su manera cada una de las familias que lo habitan ha construido ladrillo a ladrillo sus casas y así mismo el barrio. Mi casa de un piso, “la casa de don Cristo”- como dirían los vecinos-  hoy es de 3 pisos , al igual que la mayoría. He visto crecer las casa y el barrio, he visto progresar a su gente y también he visualizado lo que quiero que sea. Es un barrio sin proyectos, sin unión y con estigmas.

Cuando empecé mi vida en el colegio entendí porque mi barrio es un barrio fantasma, estudie en el colegio Gerardo paredes ubicado en el barrio “famoso”: el Rincón, es el barrio más grande, no sé donde empieza ni donde termina es por ello que muchas veces hasta quienes hemos crecido en el Gloria Lara a veces sentimos que somos el Rincón. Muchas veces he llegado a pensar que el rincón es como una Colombia y El Gloria Lara como un San Andrés y providencia.

Para definir el rincón La única manera de hacerlo es: un centro chiquito, debido a es el lugar a donde la gran mayoría vamos a hacer compras ya sea de víveres, ropa o zapatos. Si no encuentras lo que buscas ahí, también desde siempre hemos tenido la otra alternativa, centro Suba, este era la locura en sus inicios, sé que no fue el primer centro comercial de Suba pero si el primero que era “cercano” a nosotros, También en centro suba esta la alcaldía de la localidad, la notaria, la casa de integración, los bomberos, la policía y el mirador que conocí hace pocos años y fue una de las experiencias más chéveres, pues toda la vida aquí y no sabía que teníamos un mirador! Tambien en centro suba esta el Instituto donde estudie auxiliar de enfermería, gracias a esto también conocí el hospital de suba, Nivel II al que nadie le tiene fe, pero de vez en cuando se gana una buena crítica.

Hoy puedo decir No conozco Suba ni Gloria Lara pero con la misma seguridad digo: Aquí estoy para conocerlas!